BEIJING, 24 nov (Xinhua) — “Modernizarse desde el Sur Global implica redefinir el concepto mismo de desarrollo y hacerlo mediante la justicia, la equidad, la sostenibilidad social y ambiental y la participación ciudadana”, sostuvo el director ejecutivo del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO), Pablo Vommaro, en una entrevista con Xinhua durante el Foro sobre Modernización del Sur Global, celebrado recientemente en Beijing. “China tiene mucho que aportar en este camino y la colaboración con América Latina y el Caribe fortalecerá nuestras capacidades compartidas”, añadió. URGENCIA DE UNA MODERNIZACIÓN DESDE EL SUR GLOBAL “Durante décadas, la modernización se concibió como un camino único y lineal, emulado del Norte Global y evaluado exclusivamente por parámetros como el crecimiento del Producto Interno Bruto, la industrialización y el acceso tecnológico”, explicó Vommaro. Al mismo tiempo, según el directivo, vivimos en un mundo que se enfrenta a múltiples crisis (climática, económica, cultural, política, sanitaria y de gobernanza global), las cuales evidencian las limitaciones del modelo de desarrollo occidental dominante. “América Latina y el Caribe, así como África y Asia, conocen bien las consecuencias de las modernizaciones impuestas, como desigualdades estructurales, extractivismo, degradación ambiental y fragmentación social”, indicó Vommaro, y agregó que se necesitan nuevos pactos ecosociales que garanticen el acceso a la tierra, el agua y la energía para todos. “Una modernización desde el Sur debe ser ecológica y ecosocial, integrando la justicia ambiental, los derechos de la naturaleza y transiciones energéticas justas”, señaló el director ejecutivo. En un ámbito igualmente crucial, como es el tecnológico, Vommaro advirtió sobre la no neutralidad de los algoritmos, los cuales replican los sesgos, las jerarquías y las desigualdades del mundo que los entrena. “Si no participamos activamente en la creación de estas tecnologías, nos veremos reducidos a meros consumidores de la inteligencia ajena. El Sur Global tiene la responsabilidad y el derecho de desarrollar su propia IA diversa, ética, adaptada al contexto y capaz de aprender de nuestro lenguaje, cultura y realidad”, afirmó. Frente a este panorama, recalcó la urgencia de “forjar una nueva arquitectura civilizacional en la que los pueblos del Sur Global tengan voz, pensamiento y poder de decisión, y un nuevo horizonte civilizacional que sea justo, verde, intercultural y solidario”. “Hoy sabemos que no existe una única modernidad posible. La modernización desde el Sur Global no se trata de adaptación, sino de transformación. No se trata de copiar al Norte, sino de innovar a partir de nuestras propias historias y realidades. No se trata de servir a unos pocos privilegiados, sino de aplicarse para todos los pueblos, basada en la cooperación, la inclusión y el aprendizaje recíproco”, señaló. COLABORACIÓN CON CHINA EN EL MARCO DEL SUR GLOBAL “China nos permite mostrar caminos alternativos de modernización, nos permite encontrar modos alternativos de cooperar, no de competir, sino de beneficiarnos mutuamente”, aseguró Vommaro. “La Iniciativa de la Franja y la Ruta y la Iniciativa para la Gobernanza Global (IGG) propuestas por China”, señaló el directivo, “ofrecen una hoja de ruta valiosa para concebir una modernización que sea justa, sostenible y cooperativa.” La IGG destaca cinco principios: adherirse a la igualdad soberana, respetar el Estado de derecho internacional, practicar el multilateralismo, promover un enfoque centrado en las personas y enfocarse en emprender acciones reales. “Estos convergen en la búsqueda de un sistema internacional más equilibrado, plural y solidario que promueva la paz, la justicia social y la sostenibilidad ambiental, y responden directamente a las aspiraciones históricas de América Latina y el Caribe”, afirmó. Según el máximo representante de CLACSO, América Latina y el Caribe son tierras de inmensa biodiversidad, pero también epicentros del extractivismo y la desigualdad. En este sentido, la región tiene un amplio margen para cooperar y trabajar junto con China en el desarrollo de infraestructura verde, tecnologías limpias y estrategias conjuntas contra el cambio climático, así como para lograr una modernización más justa, igualitaria y que genere bienestar para las personas. “La modernización en el siglo XXI está marcada por la revolución tecnológica. La inversión pública de China en inteligencia artificial y computación cuántica demuestra que el conocimiento puede impulsar el bienestar colectivo, no solo el lucro privado”, indicó Vommaro, y añadió que esto abre oportunidades para la cooperación científica y tecnológica entre China y América Latina y el Caribe, enmarcadas en una visión ética del desarrollo que fortalece las capacidades de cada país. La crisis del multilateralismo exige una renovación profunda del orden mundial, señaló el director ejecutivo, quien también mostró su respaldo al concepto de una comunidad de futuro compartido para la humanidad. “En el panorama político mundial actual, es importante defender el multilateralismo, no caer en la trampa de un mundo polarizado, dividido, bipolar o unilateral, y poder encontrar metas comunes para luego trabajar desde el multilateralismo. Desde América Latina y el Caribe, dicha comunidad que compartimos profundamente se construirá sobre la base del conocimiento compartido, la cooperación solidaria y el respeto mutuo”, recalcó. “Otras iniciativas como los BRICS, los BRICS Plus y el Foro China-CELAC también son expresiones actuales de esfuerzos conjuntos para promover una gobernanza global para el futuro”, indicó Vommaro. CONTRIBUCIONES DE CLACSO AL SUR GLOBAL CON CHINA En los últimos años, el CLACSO e instituciones de investigación y universidades de China han llevado a cabo intercambios y una profunda cooperación académica, trabajando juntos para impulsar el sistema de conocimiento de la modernización del Sur Global. Por ejemplo, el CLACSO creó el Centro de Estudios e Intercambio entre América Latina, el Caribe y China, una plataforma académica y cultural que promueve la cocreación de conocimiento, la transparencia y la sostenibilidad. Investigadores, docentes y estudiantes de ambas regiones participan articulando conocimientos, prácticas y horizontes compartidos. Desde 2019, el CLACSO y la Academia de Ciencias Sociales de China han desarrollado grupos de trabajo, investigaciones conjuntas, publicaciones colaborativas y convocatorias de proyectos bilaterales sobre temas como la reducción de la pobreza, el cambio climático, la sostenibilidad ambiental, la gobernanza global, la migración y los derechos humanos. “La colaboración entre el CLACSO y la Academia de Ciencias Sociales de China es un ejemplo concreto de cooperación Sur-Sur. Esta alianza no es solo institucional, sino civilizacional, y constituye un compromiso con un internacionalismo del conocimiento”, expresó. Además, el director ejecutivo presentó el nuevo proyecto del CLACSO, “La Iniciativa de Gobernanza Global desde la perspectiva de América Latina y el Caribe”, que analiza sus impactos y potencial para el Sur Global, y aporta conocimiento situado para una nueva arquitectura de cooperación internacional. “En ese sentido, podemos afirmar que América Latina, el Caribe, China y el Sur Global conforman una comunidad de futuro compartido, forjada mediante la cooperación y la persecución de objetivos comunes”, concluyó Vommaro. Fin

Por Vimag