BELÉM, Brasil, 17 nov (Xinhua) — El secretario ejecutivo de Cambio Climático de la ONU, Simon Stiell, demandó hoy lunes a ministros y negociadores a acelerar las discusiones más complejas de la 30ª Conferencia de las Partes (COP30) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático que se lleva a cabo en la ciudad brasileña de Belém. “Elogio el espíritu de buena voluntad que ha reinado durante toda la primera semana. Esto refleja la convicción generalizada de que el Acuerdo de París (2015) es la única forma que tiene la humanidad de sobrevivir a esta crisis climática y de extender los enormes beneficios de la acción climática a todas las naciones”, dijo Stiell en el panel “Diálogo de Alto Nivel de Contribuyentes del Fondo de Adaptación”. Flanqueado por los presidentes de la COP30, André Correa do Lago, y de la COP29, Mukhtar Babayev, el funcionario de la ONU agregó que “todos somos conscientes de los obstáculos”, pero “también percibo una profunda conciencia de lo que está en juego y de la necesidad de mostrar una cooperación climática firme en un mundo fracturado”. Instó, además, a demostrar que la cooperación climática funciona para lograr avances reales, aunque necesita trabajar “más rápido y de manera más justa”. Dijo que en la primera semana del encuentro hubo importantes avances en la Agenda de Acción, una parte cada vez más clave del marco de París. “En siete días, las naciones han reunido un billón de dólares para invertir en energía limpia y redes eléctricas, se han unido en torno a un plan global para cuadruplicar los combustibles sostenibles. Han impulsado nuevas oleadas de industria verde y han comenzado a preparar una línea de inversión para nuevas medidas de adaptación”, señaló. Stiell afirmó que la buena noticia es que en 2024 más de 2,2 billones de dólares fluyeron hacia la energía renovable, lo que representa más que el Producto Interno Bruto (PIB) de más de 180 países, aunque el ritmo del cambio en la economía real no ha sido igualado por el avance en la negociación. “Los desastres climáticos arruinan millones de vidas y golpean todas las economías, lo que hace subir los precios de los alimentos y otras necesidades básicas. Todos sabemos lo que está en juego”, afirmó. Stiell reconoció que hay una enorme cantidad de trabajo por delante para los ministros y negociadores en la COP30 que se lleva a cabo hasta el 21 de noviembre en el estado amazónico de Pará (norte). “No podemos permitirnos perder tiempo con retrasos tácticos u obstruccionismos. El tiempo de la diplomacia teatral ha pasado. Ahora es el momento de subirnos las mangas, unirnos y hacer el trabajo”, afirmó. Fin
