Por Cristóbal Chávez Bravo SANTIAGO, 11 nov (Xinhua) — Algunos no tienen extremidades, otros registran movilidad reducida, pero lo que todos sí poseen es una profunda resiliencia para competir como paranadadores en los Juegos Parapanamericanos Juveniles Chile 2025, para dejar en alto a sus países y transmitir un mensaje de superación frente a la adversidad. David Sepúlveda es un joven colombiano de 17 años que compite en la paranatación en la categoría S8, que considera a quienes tienen la coordinación ligeramente limitada, uso de un solo brazo o la ausencia de extremidades. “Estoy muy contento, muy feliz, una experiencia muy chévere (genial)”, confesó a Xinhua el deportista, que sueña con llegar a un mundial o a unos Juegos Paralímpicos y lograr una medalla por Colombia. “Empecé a nadar a los siete años. Estaba en mi casa sin nada que hacer y decidí practicar un deporte. Les dije a toda mi familia, intenté en varios deportes, pero me gustó mucho la natación”, dijo quien tiene amputación congénita de una pierna y un brazo. “Es un gran orgullo representar a mi país en competencias como estas. Todo se puede cumplir con esfuerzo y dedicación. Si uno se esfuerza todo es posible”, dijo el joven resiliente que alcanzó una final y logró el cuarto lugar. Sepúlveda aprovechó la ocasión para tomar fotos a la portentosa cordillera de Los Andes, cuyos picos están cubiertos de nieve gracias a las lluvias primaverales en Santiago de Chile. Los Juegos Parapanamericanos Juveniles Chile 2025 se celebraron en la región Metropolitana y de O’Higgins, ambas en el centro del país, entre el 31 de octubre y 9 de noviembre y reunió a más de 1.500 representantes de 33 países del continente repartidos en 13 deportes. Las competencias de natación de los Juegos Parapanamericanos Juveniles Chile 2025 se realizaron en el Centro Acuático del Parque Estadio Nacional, en la capital chilena, un recinto refaccionado para los pasados Juegos Panamericanos Santiago 2023. Las montañas teñidas de blanco también llamaron la atención de los nadadores mexicanos, como a Saulo Vázquez, de 18 años, que compite en la clase SB8 (específica para el estilo pecho). Esta categoría está destinada a atletas con coordinación ligeramente limitada, uso de una sola pierna o brazo, o la ausencia parcial de una extremidad. “La alberca está increíble, las condiciones son muy padres (geniales) para nadar. Bajé todos mis tiempos y la verdad es que estoy muy feliz de estar aquí”, dijo a Xinhua el joven originario de Guadalajara. Compitió en 100 metros pecho y fue su primera experiencia fuera de México. “Chile es un muy buen país para iniciar porque todo lo hacen con alegría y mucho amor. Me siento muy bienvenido”, dijo el joven que no ocultaba su alegría. Su horizonte son los Juegos Paralímpicos Los Ángeles 2028, en Estados Unidos, donde tiene focalizadas sus energías. Su compatriota de 15 años, Jonathan Hernández, también resaltó la piscina “muy chida”, que en el argot mexicano es genial, quien alcanzó dos finales y consiguió en cuarto y quinto puesto. Hernández compite en la clase S9 (para el resto de los estilos) y SB8 (para pecho), destinada a quienes tienen una limitación considerable en una pierna o la ausencia de extremidades. Limitaciones que no amilanan su sueño: “Yo quiero llegar a ser olímpico y ganar una medalla”. La Paranatación es uno de los deportes más inclusivos del programa paralímpico porque reúne a deportistas con discapacidad física, visual e intelectual en pruebas individuales y de relevo, según detalló la organización. Por esta razón, nadan en una piscina olímpica de 50 metros que mantiene las mismas distancias y estilos que la natación: libre, espalda, pecho, mariposa y combinado individual. “Es un deporte emblemático del movimiento paralímpico, pues combina fuerza, resistencia y técnica, a la vez que transmite un mensaje de superación y accesibilidad universal”, agregaron. Ese espíritu transmite el paranadador peruano de 14 años Ángel de Jesús Cruzado, quien pertenece a la categoría S7, debido a que no tiene extremidades inferiores. “Un docente de física me dijo que me metiera al agua porque quizá me sentía bien. Lo intenté y me gustó también. Además, como que en el agua no se escucha lo que te dicen, me gusta mucho”, aseveró a Xinhua el atleta oriundo de Lima. “Nací con esta condición, tuve el apoyo de mis papás. Mi mamá me apoyó desde que empecé esa idea de la natación. Aspiro a conseguir una medalla e ir a un mundial. Viajar lejos de donde soy, conocer cosas nuevas”, dijo. Aunque su siguiente gran meta son los Juegos Parapanamericanos Juveniles o una competencia internacional de alto nivel, donde espera dejar en alto al deporte de su país. Fin
