LA HABANA, 16 oct (Xinhua) — El libro digital “La Habana en el Barrio Chino (Calles y callejones)”, del investigador cubano Marcos Antonio Tamames Henderson, fue presentado este jueves en la Cuchilla del Barrio Chino, como parte de las celebraciones por el 65 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre China y Cuba. La obra propone un recorrido simbólico por las calles y callejones que atraviesan el Barrio Chino de La Habana, con el propósito de rehabilitar la toponimia de la localidad, dijo el autor durante la presentación. “Más que una guía, el texto constituye un proyecto de recuperación de la identidad urbana”, subrayó. Tamames, doctor en Ciencias sobre Arte y profesor titular del Colegio Universitario San Gerónimo de la Universidad de La Habana, explicó que el libro busca fomentar el diálogo entre generaciones y fortalecer el sentido de pertenencia de los residentes de esta zona emblemática de la capital cubana. “El Barrio Chino no responde al sentido más tradicional de la célula inicial que nació a mediados del siglo XIX”, aclaró el también investigador de la Casa de Artes y Tradiciones Chinas. En la actualidad, la unidad presupuestada “Barrio Chino” abarca un área extensa, desde la calle Reina hasta Zanja. A través del estudio de los nombres de las calles, su evolución y transformaciones, el volumen invita a conocer no solo la historia del barrio, sino también la de La Habana y, en cierta medida, la de Cuba. “La intención es que las familias puedan decir con orgullo que habitan el Barrio Chino”, afirmó el autor. El texto destaca que este enclave fue, desde mediados del siglo XIX, el principal asentamiento de la comunidad china en el Caribe. Allí florecieron modos de vida, espacios de convivencia y una arquitectura sobria, marcada por la estética tradicional china, que aún perdura. El autor también resaltó la capacidad de integración de los inmigrantes chinos, quienes establecieron una red institucional sólida y contribuyeron activamente a la vida económica y cultural de la ciudad. En el libro, las calles se convierten en testigos de la historia compartida. “Cuando se habla de las calles, se habla también de las personas, de las instituciones, de los espacios de reunión y de las casas que habitaron familias chinas”, apuntó Tamames. El Barrio Chino de La Habana, ubicado en el municipio capitalino de Centro Habana, es considerado uno de los enclaves asiáticos más antiguos y significativos de América Latina. Fin
