Por Pablo Giuliano SAO PAULO, 10 oct (Xinhua) — La mayor ruta ecológica de senderismo de América Latina, unos 500 kilómetros cruzando la selva amazónica hacia la desembocadura en el océano Atlántico, será inaugurada en la 30ª Conferencia de las Partes (COP30) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, en noviembre en la ciudad brasileña de Belém, estado de Pará (noreste), anunciaron hoy viernes fuentes del Ministerio de Medio Ambiente y Cambio Climático. El “Trilha Amazônia Atlântica”, un sendero de 500 kilómetros que une selvas, manglares, comunidades quilombolas y reservas naturales de Pará, se presenta como un nuevo modelo de turismo sostenible que combina conservación ambiental, generación de ingresos y valorización cultural, explicó en entrevista a Xinhua Bernardo Issa de Souza, coordinador general de Gestión del Sistema Nacional de Unidades de Conservación de la Naturaleza (SNUC), de la cartera de Medio Ambiente. “El lanzamiento será una de las actividades oficiales durante la COP30. Este sendero por el que no podrán transitar automóviles es una herramienta concreta para conectar la conservación con el desarrollo local”, afirmó Issa de Souza. La ruta será uno de los legados de la COP30 para el área del turismo sostenible en la selva amazónica brasileña. La expectativa es que en el primer año del camino el recorrido sea visitado por unas 10.000 personas a pie o en bicicleta, según el Ministerio de Medio Ambiente y Cambio Climático. Issa de Souza dijo que el sendero ya está señalizado y atraviesa 13 áreas protegidas, entre ellas siete unidades de conservación y seis territorios quilombolas, comunidades afrodescendientes que viven en estrecha armonía con la naturaleza. “Funciona como un corredor ecológico y cultural, que permite el tránsito de la fauna, pero también de personas, saberes y tradiciones. Es turismo de base comunitaria en su esencia”, destacó el funcionario, quien citó que el trabajo de divulgación le corresponderá también a las autoridades del sistema turístico. El sendero recorre desde la ciudad de Belém, capital de Pará, y llega hasta la Sierra do Piriá, en la divisa con el vecino estado de Maranhâo hacia el este. “El turista puede dormir en una hamaca, comer la comida del lugar, remar en una canoa, compartir la vida cotidiana con los habitantes”, explicó el funcionario al subrayar que ese contacto directo con la comunidad es el rasgo distintivo del proyecto. “No se trata solo de apreciar paisajes, sino de vivir la experiencia amazónica de forma auténtica y responsable”, indicó. El recorrido, que puede completarse por tramos, cuenta con puntos de apoyo, hospedajes familiares y señalización continua. En el municipio Bragança, por ejemplo, se inaugurará un ramal acuático, donde los visitantes podrán desplazarse en canoas tradicionales por los ríos amazónicos. El coordinador general de Gestión del Sistema Nacional de Unidades de Conservación de la Naturaleza acotó que Brasil es reconocido intenacionalmente por este tipo de proyectos de senderos en la selva amazónica y en otros biomas preservados del país. La generación de un polo de atracción turística sostenible puede generar, según Issa, interés en los jóvenes que buscan salidas laborales en actividades que garanticen la preservación de la biodiverssividad. “Estos senderos, junto con la bioeconomía, pueden ofrecer nuevas fuentes de ingresos sin destruir la selva”, precisó. “Brasil tiene un potencial enorme en turismo sostenible y queremos mostrarlo al mundo en la COP30”, agregó. Por su parte, Camila Silva, analista ambiental quien también participa en el proyecto, destacó a Xinhua que el sendero “es la mayor ruta señalizada de América Latina y un símbolo de integración y no es solo un corredor ecológico: es un puente entre pueblos y culturas”. El proyecto integra la “RedeTrilhas” (Red de Senderos), que busca aproximar a los brasileños de las áreas urbanas a la naturaleza, fortaleciendo la conciencia ambiental y el orgullo por el patrimonio natural. Para facilitar la experiencia de los visitantes, la plataforma digital “eTrilhas” permitirá acceder a información sobre servicios, hospedajes y productos locales a través de un código QR disponible en los puntos del recorrido. La iniciativa fue seleccionada por la Agencia Brasileña de Promoción Internacional del Turismo (Embratur). Fin