LA PAZ, 21 ago (Xinhua) — El presidente de Bolivia, Luis Arce, informó hoy jueves que convocará a los dos candidatos que disputarán la segunda vuelta electoral: Rodrigo Paz, del Partido Demócrata Cristiano (PDC), y Jorge “Tuto” Quiroga, de Alianza Libre, para abordar el tema de la crisis económica y la falta de combustibles en el país. En conferencia de prensa desde la Casa Grande del Pueblo, sede del Gobierno boliviano, Arce señaló que ninguno de los aspirantes ha planteado, hasta ahora, soluciones concretas e inmediatas para los problemas más urgentes. “Queremos mostrarles la situación económica por la que estamos atravesando (…) el problema del combustible y lo que estamos enfrentando para que, desde ahora, cualquiera sea la opción ganadora del balotaje (…) vayan viendo este problema para poderlo encarar y resolver”, expresó el mandatario. “No he escuchado yo una propuesta de solución concreta y de corto plazo al problema del combustible que estamos enfrentando. No hay. Entonces, yo creo que es mejor que se vayan interiorizando para que cada una de las candidaturas vaya preparando una respuesta para el pueblo boliviano”, agregó Arce. En el encuentro programado para la próxima semana se prevé que el Gobierno realice propuestas a los candidatos para saber si están de acuerdo, o no, en que se vayan realizando algunas acciones conforme a su posición política económica, que garantice el abastecimiento de combustibles hasta el 31 de diciembre. “Vamos a presentarles la información para que vean también, de manera democrática y abierta por parte del Gobierno nacional, mostrándoles todo lo que estamos atravesando, para que ellos estén totalmente involucrados en lo que tienen que enfrentar una vez resuelto el problema de las elecciones en octubre”, afirmó Arce en referencia del balotaje programado para el 19 de dicho mes. La situación económica boliviana se ha deteriorado en los últimos dos años. Desde 2023, el país sufre una escasez creciente de dólares que disparó el tipo de cambio paralelo, que llegó a cotizarse hasta en 20 bolivianos por dólar en mayo pasado, muy por encima de la paridad oficial de 6,96 bolivianos. Esta distorsión financiera ha incrementado el contrabando, encarecido las importaciones y agudizado la presión inflacionaria. En paralelo, la carencia de divisas provocó la falta de combustibles que se tradujo en largas filas en estaciones de servicio en los nueve departamentos del país. Fin