HARBIN, 15 ago (Xinhua) — Nuevas evidencias sobre la Unidad 731, una unidad japonesa de guerra bacteriológica que operó durante la Segunda Guerra Mundial, fueron presentadas hoy viernes en Harbin, capital de la provincia de Heilongjiang, en el noreste de China. Las nuevas evidencias incluyen 3.010 páginas de documentos de archivo, 194 minutos de material fílmico, 312 fotografías, 12 postales y ocho cartas, los cuales exponen en detalle los crímenes cometidos por los invasores japoneses en el marco de su guerra bacteriológica contra China. Jin Chengmin, curador de la Sala de Exhibición de Evidencias de Crímenes Cometidos por la Unidad 731 del Ejército Imperial Japonés, afirmó que la más reciente evidencia se clasifica en tres categorías principales. La primera es prueba criminal y material histórico de instituciones oficiales japonesas, incluyendo documentos de archivo, que son materiales clave en el estudio de las fuerzas japonesas de guerra bacteriológica. La segunda es el testimonio oral de antiguos miembros de la Unidad 731, obtenido por la sala de exhibición durante una investigación transfronteriza de recolección de evidencias en Japón en 2018. La tercera categoría es evidencia histórica de crímenes recopilada dentro de la ciudadanía japonesa. Las nuevas evidencias y materiales históricos revelan detalles inéditos del sistema de la guerra bacteriológica japonesa, y demuestran una vez más que la existencia de la Unidad 731 fue un crimen de Estado premeditado y organizado desde las más altas esferas del poder japonés, declaró Jin. El viernes marca el 80° aniversario de la rendición incondicional de Japón en la Segunda Guerra Mundial y el 40° aniversario del establecimiento de la sala de exhibición. Fin