RÍO DE JANEIRO, 30 jul (Xinhua) — El ministro de Emprendimiento, Microempresa y Empresa de Pequeño Porte de Brasil, Márcio França, afirmó este miércoles que el Gobierno Federal estudia subsidiar a los pequeños emprendedores que dejarán de exportar a Estados Unidos debido al arancel de 50 por ciento anunciados por el presidente estadounidense, Donald Trump, a los que calificó de “boicot” por su potencial para inviabilizar las ventas brasileñas en ese mercado. “Eso no es exactamente una tarifa. Eso es un boicot, como pasa con Cuba. Prácticamente prohíbe la venta. Con un 50 por ciento de impuesto, se prohíbe la venta, se hace inviable”, dijo França durante una entrevista en el programa gubernamental “Bom Dia, Ministro”. El ministro explicó que la medida estadounidense, prevista para entrar en vigor el 1 de agosto, aún no está formalizada por decreto ni por ley. “Es una cosa de la cabeza de Trump. Escribió en su red social y dijo que lo hará, pero en Washington todavía están definiendo cómo será esa redacción. Hay diversas versiones; una de las más comentadas es que se aplicaría solo a productos que los estadounidenses también producen”, afirmó. Según França, unos 20.000 pequeños emprendedores brasileños venden a Estados Unidos, con un volumen que representa apenas el 0,8 por ciento de los 40.000 millones de dólares exportados anualmente a ese país. “Son pequeños productores de ajo, miel, pescados, frutas, ‘açaí’ (asaí), muchos a través de cooperativas”, detalló. El ministro alertó que los productos perecederos serán los más afectados, con dificultad para colocarlos en otros mercados, debido a que más del 50 por ciento del pescado del estado de Ceará va a Estados Unidos. Son atunes, langostas, camarones, productos sofisticados difíciles de reubicar. Como solución, el Gobierno brasileño pretende subsidiar estas producciones para que sean consumidas en el mercado interno, incluso a través de la alimentación escolar o con precios más bajos al consumidor. “Si una manga cuesta un real, todo el mundo la compra. Si hacemos que el atún baje de 80 a 10 reales, se venderá. Eso se logra con subsidio”, afirmó França, quien recordó la experiencia del año pasado en Rio Grande do Sul, donde tras las inundaciones se cerraron 38.000 empresas y con ayuda estatal reabrieron 37.000. El ministro añadió que el Gobierno ya tiene listas respuestas urgentes para implementar en caso de que las tarifas entren en vigor, algunas de ellas sin necesidad de aprobación legislativa. “Tenemos organismos como Conab que pueden comprar y redistribuir productos con subsidio cruzado para ayudar a los pequeños. Como el valor afectado es bajo, sería una demostración pública de nuestra preocupación en socorrer a los más vulnerables”, explicó. El ministro destacó que Estados Unidos, que llegó a representar el 50 por ciento del destino de las exportaciones brasileñas, hoy concentra solo el 15-16 por ciento, gracias a la apertura de más de 200 nuevos mercados. “Es relevante, pero ya no es un absurdo. Vamos a intentar socorrer primero a los perecederos, pero nada impide ayudar también a todos los pequeños”, concluyó. Fin