LA PAZ, 25 mar (Xinhua) — La selección boliviana de fútbol dejó escapar este martes una oportunidad crucial para seguir en la pelea por un cupo al Mundial 2026, en un partido intenso, pero sin efectividad, al empatar 0-0 ante Uruguay en el estadio Municipal de El Alto, con lo cual se mantiene en la séptima posición de la tabla y está en riesgo de perder su lugar en zona de repechaje. La afición boliviana, ilusionada con sumar 3 puntos en casa, vio cómo su equipo dominó la posesión, generó llegadas y asedió la portería del conjunto contrario, pero sin éxito. Fue una repetición de su anterior encuentro como local, cuando también cedió puntos ante Paraguay (2-2). Esta vez, la falta de puntería y la firmeza defensiva de los uruguayos evitaron el gol que pudo haber cambiado la historia. Los primeros 10 minutos de la parte inicial, Uruguay logró mantener cierto equilibrio en la cancha, pero después “La Verde” comenzó a mostrar superioridad y con Miguel Terceros como principal protagonista inquietó al arquero Sergio Rochet. La Verde buscaba el primero y la selección uruguaya trataba de ganar tiempo, como en el minuto 35, cuando Terceros envió un centro para Víctor Ábrego, que estaba solo, pero antes llegó el arquero Rochet y se quedó tirado en el piso acusando un golpe por parte del delantero boliviano. El equipo local tenía más la pelota y jugaba cerca del área rival, pero no podía ingresar a ese sector con jugadas hilvanadas y por eso optó por los remates de media distancia, como el que ensayó Robson Matheus en el minuto 45, pero encontró bien ubicado al arquero visitante. Bolivia comenzó con todo el segundo tiempo y estuvo a punto de abrir la cuenta a solo 30 segundos del pitazo inicial. El momento de mayor peligro para La Verde llegó a los 68 minutos, cuando el volante Ramiro Vaca tomó un balón fuera del área y sacó un remate potente que se estrelló en el parante izquierdo del arquero uruguayo. En la misma jugada, Gabriel Villamil intentó el segundo disparo, pero el balón pasó rozando el poste, desatando la angustia de los hinchas en las gradas. Mientras Bolivia buscaba con desesperación, Uruguay se plantó con orden, apostando al contragolpe y aprovechando los espacios dejados por la presión boliviana. Con Marcelo Bielsa en el banquillo, la Celeste se mostró disciplinada, priorizando la solidez defensiva y esperando el error rival. El empate tuvo un significado especial para Uruguay, que no sumaba en Bolivia desde 2015. Con este resultado, la selección uruguaya corta una racha de casi una década sin puntos en territorio boliviano por las eliminatorias. Con 14 unidades, Bolivia aún se mantiene en zona de repechaje, pero con la presión de Venezuela, que podría desplazarla. Fin