BUENOS AIRES, 4 sep (Xinhua) — Efectivos de las fuerzas de seguridad de Argentina desactivaron hoy miércoles una protesta de jubilados frente al Congreso de la Nación mediante un operativo que incluyó el uso de gas pimienta y bastones y que terminó con al menos 27 personas heridas. La protesta de los jubilados tuvo lugar para rechazar el reciente veto del presidente Javier Milei a una ley del Congreso que establecía un aumento de los haberes de los pensionados, mejora que buscaba poner los ingresos en línea con la inflación registrada por Argentina en lo que va del año, del orden del 87 por ciento de acuerdo con datos oficiales. Personal de la Gendarmería Nacional, la Prefectura Naval y de la Policía Federal aplicó un protocolo antipiquetes elaborado a comienzos de este año por el Ministerio de Seguridad, en perjuicio de jubilados, pensionados y miembros de organizaciones sociales como la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), el Movimiento Evita, Barrios de Pie, la Corriente Clasista y Combativa (CCC) y el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE). La concentración de jubilados fue convocada por agrupaciones de jubilados, organizaciones sociales y partidos de izquierda con el objetivo de movilizarse desde el Congreso hasta la Plaza de Mayo, situada frente a la Casa de Gobierno. La semana pasada, más de 2.000 jubilados marcharon desde el Congreso hasta la Casa de Gobierno, en el centro de Buenos Aires, para pedir que el presidente no hiciera uso del poder de veto. En ese marco, el portavoz presidencial, Manuel Adorni, se refirió este miércoles a los haberes que percibe la clase pasiva y dijo que “todos sabemos que la única manera que hay de mejorar las jubilaciones es con crecimiento económico, no hay otra manera, no hay magia, no hay decretos mágicos y no hay populismo que pueda resolver el tema de las jubilaciones”. Fin