ASTANÁ, 4 jul (Xinhua) — En un importante acontecimiento para la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS), Bielorrusia fue aceptada hoy de manera formal como el décimo Estado miembro de la organización intergubernamental. La más reciente expansión fortalece la capacidad de la OCS para la cooperación regional y refuerza su influencia en el escenario mundial, lo cual destaca su papel como una plataforma vital para abordar los desafíos económicos y de seguridad contemporáneos. El ingreso de Bielorrusia fue formalizado en la 24ª Reunión del Consejo de Jefes de Estado de la OCS. “Bielorrusia está muy orgullosa de convertirse en miembro de pleno derecho de la OCS. Fortaleceremos el Espíritu de Shanghai de la organización basada en los principios de respeto mutuo, igualdad y solidaridad”, dijo hoy en Astaná el presidente bielorruso, Alexander Lukashenko. Desde su creación en Shanghai, China, en 2001, la OCS se ha expandido y ha pasado de ser una organización regional con seis miembros hasta convertirse ahora en una organización transregional con 10 miembros de pleno derecho, dos países observadores y 14 socios de diálogo. Se espera que Bielorrusia aproveche sus ventajas únicas para dinamizar la organización con nueva energía, dijo Yuri Yarmolinsky, un analista del Instituto de Investigación Estratégica de Bielorrusia. Bielorrusia considera a la OCS como una plataforma clave que amplía las oportunidades de cooperación en todo el continente euroasiático, dijo Yarmolinsky, quien destacó que en un mundo turbulento, Bielorrusia considera a la OCS como un pilar de apoyo crucial. Actualmente, Bielorrusia mantiene sólidas relaciones comerciales con Rusia y China, ambos miembros de la OCS. En los primeros cuatro meses de este año, el volumen comercial entre Bielorrusia y Rusia ascendió a 2,9 billones de rublos (alrededor de 33.620 millones de dólares), de acuerdo con datos oficiales rusos. China se ubica como el segundo mayor socio comercial de Bielorrusia y Bielorrusia es uno de los socios comerciales de más rápido crecimiento para China en la región euroasiática. La membresía de Bielorrusia en la OCS podría incrementar de manera significativa su volumen comercial con otros Estados miembros y permitirle aprovechar un mercado de consumidores que abarca casi la mitad de la población mundial. Ser miembro de la OCS también podría aumentar el atractivo de Bielorrusia como un destino de inversión. Como participante clave en la Iniciativa de la Franja y la Ruta, Bielorrusia podrá beneficiarse de inversiones adicionales en infraestructura, incluyendo redes ferroviarias y carreteras, gasoductos energéticos y parques industriales. Bielorrusia y otros aspirantes son atraídos a la OCS por motivos que van más allá de los meros intereses económicos. Desde su establecimiento en 2001, este organismo multilateral se ha convertido en una plataforma esencial para promover la justicia y la igualdad, así como la seguridad y el desarrollo inclusivos en las relaciones internacionales. Además de destacar que la OCS se fundó a principios de siglo, cuando aún no se habían resuelto los enfrentamientos y las divisiones que dejó la Guerra Fría, el presidente chino Xi Jinping dijo hoy en Astaná que los miembros fundadores de la OCS tomaron la decisión histórica de perseguir un desarrollo pacífico, comprometerse con la buena vecindad y la amistad, y construir un nuevo tipo de relaciones internacionales. La OCS ha resistido la prueba del cambiante panorama internacional, cuya causa radica en el hecho de que los miembros de la OCS siguen comprometidos con la buena tradición de solidaridad y coordinación, la forma de cooperación caracterizada por la igualdad y el beneficio mutuo, la búsqueda del valor de la equidad y la justicia, y la amplitud de miras de la inclusión y el aprendizaje mutuo, dijo Xi al asistir a la 24ª cumbre de la OCS. “Algunas otras organizaciones están experimentando una crisis de identidad y relevancia, y se cuestiona si todavía son necesarias”, dijo el exsecretario general de la OCS, Bolat Nurgaliyev. En lo que respecta a la OCS, está claro que la organización “se mantiene leal a su misión original, la cual se sigue realizando con éxito”, dijo. Nurgaliyev destacó el modelo único de interacción ofrecido por la OCS, caracterizado por la cooperación equitativa y de beneficio mutuo. Este enfoque se basa en un entendimiento compartido de los diversos desafíos y amenazas entre los países miembros, indicó, y añadió que la OCS enfatiza la importancia de desarrollar enfoques colaborativos y respuestas conjuntas a las situaciones complejas que puedan surgir. El sistema internacional con la Organización de las Naciones Unidas como núcleo está enfrentando múltiples amenazas y desafíos sin precedentes en la historia moderna, de acuerdo con una iniciativa que pide solidaridad entre los países para promover la justicia, la armonía y el desarrollo mundiales emitida hoy en la cumbre de la OCS en Astaná. La OCS, señaló, está firmemente comprometida a aprovechar plenamente el papel coordinador central de la Organización de las Naciones Unidas, apoyar las normas de derecho internacional universalmente reconocidas y construir un sistema mundial multipolar más representativo, más justo y más democrático, en el que todos los países, independientemente de su ubicación geográfica, tamaño territorial o estructura política, económica y social, tengan acceso equitativo a oportunidades de desarrollo. La promesa de la OCS de promover la multipolaridad se produce en un momento en el que algunos países de Occidente están intentando difundir la narrativa de un “orden mundial basado en reglas”. “Vemos que el número de aquellos que desean convertirse en miembros, observadores o socios de diálogo está creciendo de forma constante”, dijo Nurgaliyev. “Esta es la prueba de que la OCS es una estructura muy popular y efectiva que ha encontrado su nicho en el sistema de seguridad y cooperación internacionales”. La importancia de la OCS para todos los miembros es difícil de sobreestimar, dado que contribuye al fortalecimiento de su seguridad nacional, desarrollo económico e intercambio cultural, dijo Serik Korzhumbayev, editor en jefe del diario Delovoy Kazakhstan. Ante los desafíos internacionales modernos, la importancia de la OCS sólo crece y ofrece a los países miembros una plataforma para la cooperación y la interacción en favor de los intereses de desarrollo sostenible y coexistencia pacífica, añadió Fin.