LHASA, 3 jul (Xinhua) — Nyima Tsering, de 46 años, trabajó junto a sus vecinos para nivelar un terreno junto a su aldea de Carag, dentro de la ciudad de Quxu, región autónoma de Xizang, en el suroeste de China, para crear un área apta para pícnics turísticos. Los aldeanos vieron una oportunidad de negocio después de que una carretera de alta calidad se abriera oficialmente al tránsito el domingo. La autopista, que une la capital regional, Lhasa, y Xigaze, la segunda ciudad más grande de la región, tiene una extensión de 245 kilómetros y reduce a la mitad el tiempo de viaje entre las dos ciudades, llevándolo a alrededor de tres horas. “En el pasado, el camino a Lhasa era problemático para los aldeanos, pues la atención médica o hacer negocios a menudo se retrasaba debido a las incertidumbres en el viaje”, expresó Nyima Tsering. Su pueblo está a solo una hora de Lhasa, gracias a la nueva autopista. “Es más fácil transportar productos agrícolas y ganaderos a Lhasa, y los aldeanos están planeando ganar dinero a través del turismo rural”, manifestó el aldeano. “Aumentará el flujo de personas, vehículos y logística que pasa y llega a nuestra aldea. Planeamos desarrollar el turismo de experiencia agrícola y los restaurantes familiares”, indicó Wang Shengkui, jefe de un poblado subordinado a Xigaze y ubicado a lo largo de la nueva autopista. La carretera de alta calidad marca otro desarrollo significativo en el transporte de la región después de que se inaugurara en 2014 la línea ferroviaria de 251 kilómetros que une Lhasa y Xigaze. La línea ferroviaria de 435 kilómetros que une Lhasa y Nyingchi se inauguró en 2021. El pasado mes de diciembre comenzó a funcionar la segunda pista del aeropuerto internacional de Lhasa. Hasta el presente, la longitud de las carreteras en Xizang ha superado los 120.000 kilómetros, y todos los distritos, poblados y aldeas administrativos tienen acceso a carreteras asfaltadas o endurecidas. Xizang atrajo a 55,17 millones de turistas nacionales y extranjeros en 2023, gracias al rápido desarrollo de las carreteras, los ferrocarriles y la aviación civil. Decenas de miles de agricultores y ganaderos han encontrado nuevos empleos relacionados con el turismo. “Con la apertura de las vías férreas y las carreteras, cada vez más turistas visitan lugares como Xigaze y Nyingchi, además de quedarse en Lhasa”, sostuvo Zhang Tao, un guía turístico en Lhasa. Fin