SAO PAULO, 15 nov (Xinhua) — Exportadores brasileños de café adoptaron hoy sábado un tono cauteloso y de preocupación, ya que a pesar del anuncio de Estados Unidos de eliminar las tarifas de importación a cerca de 200 productos agrícolas, el grano aromático mantendrá un arancel de 40 por ciento. Brasil es el principal productor y exportador mundial de café, producto que continúa siendo blanco de las medidas aplicadas por el presidente Donald Trump por razones políticas, en solidaridad con su aliado, el expresidente Jair Bolsonaro, condenado a 27 años de prisión por intento de golpe de Estado. El Consejo de los Exportadores de Café de Brasil (Cecafé) afirmó que la decisión deja al país en desventaja frente a competidores directos. “Mejoró para nuestros competidores y empeoró para Brasil”, dijo el director general del Cecafé, Marcos Matos. Recordó que la tarifa estadounidense de importación al café brasileño cayó del 50 al 40 por ciento, mientras que Colombia, Vietnam y otros proveedores quedaron con arancel cero debido a acuerdos bilaterales previos. El presidente del Cecafé, Márcio Ferreira, sostuvo que el sector mantiene su preocupación debido a que el arancel de 40 por ciento, “si se mantiene, continúa siendo prohibitiva; Brasil sigue fuera del juego”, afirmó. Cecafé informó que entre agosto y octubre, meses de vigencia del arancel del 50 por ciento a productos brasileños, las importaciones estadounidenses de café brasileño cayeron 51,5 por ciento frente al mismo periodo de 2024. Estados Unidos es el principal destino del café del país y concentra alrededor del 16 por ciento de las exportaciones del sector. La Asociación Brasileña de Cafés Especiales (BSCA) lamentó que la medida no incluyera el fin del arancel de 40 por ciento para Brasil. La entidad indicó que la decisión “tiende a intensificar, en el corto plazo, la caída de los envíos de cafés especiales”. Entre agosto y octubre, las exportaciones de ese segmento disminuyeron cerca de 55 por ciento respecto de igual periodo del año anterior. En otros sectores, la reacción fue heterogénea. El presidente de la Asociación Brasileña de las Industrias Exportadoras de Carnes, Roberto Perosa, consideró la medida “una señal positiva” y apuntó que Estados Unidos es el segundo mayor mercado para la carne bovina brasileña. Por su parte, la Asociación Brasileña de los Productores y Exportadores de Frutas evaluó que hubo un “avance relevante”, aunque expresó preocupación por la exclusión de la uva, la segunda fruta más exportada por Brasil a Estados Unidos La entidad informó que, en el tercer trimestre de 2025, los envíos de uva al mercado estadounidense cayeron 73 por ciento en valor y 68 por ciento en volumen frente al mismo periodo de 2024. Fin

Por Vimag