BELÉM, Brasil, 13 nov (Xinhua) — La emisión mundial de dióxido de carbono (CO2) procedente de combustibles fósiles alcanzarán un récord en 2025, con aumento del 1,1 por ciento respecto al 2024, según el estudio Presupuesto Global de Carbono 2025, elaborado por el consorcio científico internacional Global Carbon Project y divulgado hoy durante la 30ª Conferencia de las Partes (COP30) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático en la ciudad de Belém del estado amazónico de Pará (norte). El estudio estima que las emisiones por el uso de combustibles fósiles alcanzarán este año los 38.100 millones de toneladas, lo que refleja que, a pesar de los avances en la descarbonización energética en numerosos países, el crecimiento de la demanda global de energía sigue superando la expansión de las fuentes renovables. Si se suman las emisiones derivadas del cambio de uso del suelo, como la deforestación, que descenderán a 4.100 millones de toneladas, el total de emisiones de CO2 será ligeramente inferior al de 2024. Con la finalización del fenómeno climático de El Niño, la capacidad de los ecosistemas terrestres para absorber carbono se ha recuperado a los niveles previos al evento, precisó la organización. El informe también alertó que el presupuesto de carbono restante para limitar el calentamiento global a 1,5 grados Celsius “está prácticamente agotado”, y que los sumideros naturales de carbono (los océanos y los bosques) se están debilitando debido al cambio climático. Según el estudio, el 8 por ciento del aumento de CO2 atmosférico desde 1960 se debe a este debilitamiento. “Con las emisiones de CO2 aún en aumento, mantener el calentamiento por debajo de 1,5 grados (Celsius) ya no es plausible”, afirmó el profesor del Instituto de Sistemas Globales de la Universidad de Exeter Pierre Friedlingstein, quien dirigió la investigación. “El presupuesto de carbono restante para alcanzar un aumento de 1,5 grados Celsius, equivalente a 170.000 millones de toneladas de dióxido de carbono, se agotará antes de 2030 al ritmo de las emisiones actual. Estimamos que el cambio climático está reduciendo actualmente los sumideros combinados de carbono terrestre y oceánico, una clara señal del planeta Tierra de que necesitamos reducir drásticamente las emisiones”, explicó Friedlingstein. Por su parte, la profesora de la Universidad de East Anglia (UEA) Corinne Le Quéré destacó que 35 países han logrado reducir sus emisiones al tiempo que hacen crecer sus economías (el doble que hace una década), pero advirtió que el progreso sigue siendo “demasiado frágil para traducirse en disminuciones globales sostenidas”. En tanto, el investigador del Centro CICERO para la Investigación Climática Internacional Glen Peters recordó que han pasado 10 años desde el Acuerdo de París y que, “a pesar de los avances, las emisiones de CO2 de origen fósil continúan aumentando sin cesar”, al tiempo que subrayó que las tecnologías limpias ya son rentables frente a los combustibles fósiles, pero que “los países deben intensificar sus esfuerzos”. Desde Alemania, la integrante del Departamento de Geografía de la Universidad Ludwig-Maximilian de Múnich Julia Pongratz señaló que la reducción de las emisiones derivadas del uso del suelo muestra la eficacia de las políticas ambientales, destacando que “las tasas de deforestación en la Amazonía son las más bajas desde 2014”. Sin embargo, advirtió, los incendios de 2024 demostraron “la fragilidad del ecosistema si no se limita también el calentamiento global”. Entre los principales resultados del Presupuesto Global de Carbono 2025 figuran que India registrará un alza del 1,4 por ciento, frenada por un monzón temprano que redujo la demanda de refrigeración y por la rápida expansión de fuentes limpias. En Estados Unidos, las emisiones subirán un 1,9 por ciento, y en la Unión Europea, un 0,4 por ciento, tras varios años de descenso, debido a un invierno más frío y otros factores. En Japón, las emisiones disminuirán un 2,2 por ciento, conforme a la tendencia de los últimos años, mientras que en el resto del mundo, el incremento promedio será del 1,1 por ciento. Por tipo de combustible, se prevén aumentos del 0,8 por ciento en el carbón, 1 por ciento en el petróleo y 1,3 por ciento en el gas natural. Las emisiones del transporte aéreo internacional crecerán un 6,8 por ciento, superando los niveles previos a la pandemia, mientras que las del transporte marítimo se mantendrán estables. El informe señaló además que, durante la última década, las emisiones por deforestación permanente se mantuvieron en torno a 4.000 millones de toneladas anuales, compensadas en un 50 por ciento por reforestación y regeneración forestal. El estudio advierte que las selvas del sudeste asiático y de amplias zonas de Sudamérica han pasado de ser sumideros de carbono a emisores netos de CO2 debido a la combinación del cambio climático y la deforestación. La concentración de CO2 en la atmósfera alcanzará este año 425,7 partes por millón (ppm), un 52 por ciento por encima de los niveles preindustriales. El Presupuesto Global de Carbono 2025, que cumple su vigésima edición, fue elaborado por más de 130 científicos de más de 90 instituciones internacionales, y publicado este jueves en la revista “Earth System Science Data”. Fin

Por Vimag