SAO PAULO, 10 oct (Xinhua) — El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, anunció este viernes un nuevo modelo de crédito inmobiliario que ampliará, con menores tasas de interés, el acceso a programas gubernamentales de vivienda a las personas de clase media. “A partir de ahora, la clase media también pasa a ser asistida por los programas de vivienda del país. Este programa fue hecho pensando en esa gente, en dar a aquellos que todavía no tienen derecho, el derecho de tener su casita un poco mejor”, expresó el mandatario durante un acto oficial en la ciudad de Sao Paulo (sureste). Lula explicó que el nuevo sistema del Programa Mi Casa Mi Vida, del gobierno federal, responde a una “inquietud” personal sobre la falta de acceso de los trabajadores de clase media a una vivienda adecuada, mediante el aumento de la oferta de crédito para las familias con ingresos superiores a 12.000 reales (unos 2.120 dólares). La iniciativa elimina progresivamente los encajes bancarios (depósitos compulsivos) en el Banco Central para permitir que el total de los recursos depositados en la caja de ahorro sirva como referencia para el financiamiento habitacional. Además, el valor máximo del inmueble financiado en el Sistema Financiero de la Vivienda subirá de 1,5 millones a 2,25 millones de reales (de unos 265.000 a 397.000 dólares), mientras que el 80 por ciento de los financiamientos habitacionales deberán realizarse con tasas de interés limitadas a 12 por ciento anual como tope. “Un trabajador metalúrgico, un bancario, un químico, un gráfico, un docente (…) esas personas no tienen derecho a comprar casa porque no son pobres, entonces no califican para los programas gubernamentales, pero les cuesta acceder a créditos tradicionales”, sostuvo Lula da Silva. El Gobierno prevé que con la nueva modalidad el banco público Caixa Econômica Federal podrá financiar 80.000 nuevas viviendas hasta 2026. Según los datos oficiales, actualmente el 65 por ciento de los recursos captados por los bancos a través de las cajas de ahorro deben destinarse a crédito habitacional, el 15 por ciento puede utilizarse libremente y el 20 por ciento permanece como depósito obligatorio en el Banco Central. Fin