GUANGZHOU, 10 sep (Xinhua) — Con la reciente inauguración de un laboratorio conjunto entre China y Chile vinculado a la ingeniería naval, el país asiático y la región latinoamericana y caribeña continúan avanzando por la vía rápida en la cooperación científica y tecnológica para la nueva era. El Laboratorio Conjunto Internacional para la Prevención Inteligente de Desastres y Respuesta a Emergencias en la Ingeniería Marina China-Chile, iniciado conjuntamente por universidades chinas y latinoamericanas, abrió sus puertas en la ciudad de Dongguan, provincia de Guangdong, en el sur de China. Este es el más reciente avance en la profundización de la cooperación entre China y América Latina y el Caribe (ALC) en el campo de la ingeniería naval. Ma Hongwei, rector del Instituto Politécnico de Dongguan, cofundador del laboratorio, explicó que el proyecto combina las fortalezas de China en las tecnologías de prevención de desastres marinos con las experiencias prácticas de las universidades chilenas en los sistemas de alerta de desastres y los recursos de datos sobre los desastres en el Pacífico. De acuerdo con Ma, la institución impulsará la cooperación chino-chilena en ciencia, tecnología y capacidad de producción en materia de prevención y mitigación de desastres marinos, el desarrollo de recursos en el mar y el crecimiento de este tipo de economía, a través del enfoque de “intercambio de tecnología, prevención conjunta de riesgos y establecimiento colaborativo de normas”. La entidad representa un hito importante en la colaboración entre ambos países en relación con la educación superior y la investigación científica, aseguró León Bravo Ramírez, vicerrector de la Universidad de La Frontera, también cofundador del laboratorio. El laboratorio aunará los recursos ventajosos de ambas partes para abordar conjuntamente los retos globales en la ingeniería marina y la prevención de desastres marinos, promoviendo así el desarrollo sostenible, agregó Bravo. Este año se cumple el décimo aniversario de la propuesta de la comunidad de futuro compartido China-ALC. Durante la última década, la cooperación científica y tecnológica entre ambas partes ha elevado continuamente su calidad y su nivel, formando una red de cooperación de múltiples niveles y ámbitos. Por ejemplo, el Centro de Transferencia Tecnológica China-América Latina y el Caribe, establecido hace unos años en la provincia de Guangdong, bajo los auspicios del Ministerio de Ciencia y Tecnología de China, ha creado múltiples sucursales en Cuba, Chile y Uruguay. Esta iniciativa ha sentado las bases para una red de cooperación científica y tecnológica internacional entre China y ALC, emergiendo como una nueva fuerza dinámica que impulsa el desarrollo sostenido y saludable de las relaciones entre ambas partes en la nueva era. Además, la estación del espacio lejano en Argentina, un proyecto conjunto de China y el país sudamericano, ha contribuido a apoyar las misiones Chang’e-4 y Tianwen-1. El satélite de recursos terrestres, desarrollado conjuntamente por China y Brasil, ha proporcionado medios adicionales para la cooperación bilateral en materia de la tecnología espacial. También se está acelerando el establecimiento del Centro China-ALC para la Innovación Alimentaria Sostenible. La cooperación tecnológica entre China y ALC ha entrado en una fase crucial de rápido desarrollo. En este contexto, se lanzó oficialmente el 3 de septiembre el Plan de Asociación Científica y Tecnológica China-ALC para la nueva era. El programa se centra en seis iniciativas clave, que son la alineación de estrategias de desarrollo tecnológico, la investigación conjunta, los intercambios científicos y culturales, la construcción conjunta de plataformas de colaboración, la transferencia de tecnologías y la gobernanza científica global, sostuvo Dai Gang, director general del departamento de cooperación internacional del Ministerio de Ciencia y Tecnología. Dai afirmó que esta iniciativa tiene como objetivo facilitar la cooperación integral en innovación, establecer una plataforma para la colaboración científica y compartir experiencias de desarrollo tecnológico entre ambas partes. De conformidad con el plan, en los próximos cinco años, China apoyará 50 programas de intercambio entre institutos de investigación asociados, respaldará a 100 jóvenes científicos de países de ALC para llevar a cabo estancias de investigación de corta duración en instituciones de investigación, universidades y empresas chinas y prestará asistencia a 100 técnicos de la región para que reciban formación en ámbitos como la inteligencia artificial, el desarrollo sostenible, la salud ecológica y la lucha contra la pobreza basada en la ciencia. En la fecha en que se dio a conocer oficialmente el plan, se creó también la Alianza Universitaria China-ALC para la Educación Digital, con el fin de promover la innovación en la educación inteligente, intensificar la profunda integración de la industria, la educación y la investigación, y fomentar ecosistemas de talento. Asimismo, la alianza intenta facilitar un mayor reconocimiento mutuo de cursos y créditos entre universidades chinas y latinoamericanas y caribeñas, el desarrollo colaborativo de una red internacional de intermediarios de transferencia de tecnologías y la formación específica de profesionales globalizados que posean competencia bilingüe, experiencia técnica y conocimientos del sector. Ante el desafío global que supone el avance tecnológico en nuestra época, tanto China como ALC reconocen que la apertura y la cooperación son el único camino a seguir. La profundización de los intercambios y la cooperación con China resulta beneficiosa, aseguró Gonzalo Tancredi, director de la Dirección Nacional de Innovación, Ciencia y Tecnología del Ministerio de Educación y Cultura de Uruguay. Fin