KUNMING, 6 sep (Xinhua) — La modernización de China, enraizada en las condiciones nacionales del país y basada en los logros destacados de la civilización humana, ofrece lecciones valiosas para otros países, especialmente aquellos del Sur Global, según un informe publicado hoy sábado. Titulado “Responder a las preguntas de nuestro tiempo: la importancia global y el valor práctico de los bienes intelectuales públicos de China”, el informe fue dado a conocer por el Instituto Xinhua, un grupo de expertos afiliado a la Agencia de Noticias Xinhua. La modernización china ha reescrito el paradigma de la modernización global y ha creado una nueva forma de progreso humano. Representa un salto significativo, más allá de las teorías y prácticas de este proceso al estilo occidental, con lo cual rompe el mito de que “la modernización es igual a la occidentalización”, afirma el documento. El mismo señala que la modernización china permite a los países con un desarrollo tardío alcanzar un desarrollo impulsado internamente. Hace hincapié en caminos de desarrollo arraigados en las propias condiciones nacionales, la cultura y las tradiciones históricas de cada país, en lugar de simplemente copiar modelos externos, en particular los de Occidente. El concepto de desarrollo impulsado internamente anima a los países a explorar rutas de modernización adaptadas a sus realidades únicas, aprovechando la dotación de sus recursos, tradiciones culturales y estructuras sociales, al tiempo que innovan en sus instituciones y diseñan políticas efectivas. La práctica de China demuestra que los países en desarrollo no necesitan depender de un único modelo foráneo; por el contrario, al combinar su impulso interno con el uso pacífico de los recursos externos, pueden encontrar sus propias vías hacia el progreso. Este enfoque ofrece un ejemplo crucial de una ruta de desarrollo para los países del Sur Global, cuyas economías siguen siendo relativamente subdesarrolladas. La modernización china, basada firmemente en la independencia, enfatiza la autosuficiencia y la fortaleza de alto nivel en los campos económico y científico. Por medio de la innovación independiente, la modernización industrial y la mejora institucional, reduce la dependencia excesiva en los recursos externos y asegura iniciativas estratégicas para el desarrollo nacional, destaca el informe. La experiencia de China muestra que los países en desarrollo no necesitan seguir un camino de dependencia para lograr el crecimiento económico y, en cambio, pueden asegurar un rol proactivo en la economía global. Esta senda de desarrollo independiente brinda una orientación teórica para un Sur Global que busca liberarse de las limitaciones económicas externas. La modernización china está firmemente centrada en las personas: el desarrollo es para el pueblo, del cual depende y al que le proporciona sus beneficios. Este enfoque refleja la profunda comprensión que posee el país respecto a la esencia de la modernización, que no es tan solo una herramienta para el crecimiento económico, sino un camino hacia la felicidad de las personas y la equidad social, resalta el documento. Mientras busca un desarrollo de alta calidad y el crecimiento del “pastel”, China otorga igual importancia a distribuir ese “pastel” de manera justa, trabajando para abordar el empleo, la distribución de los ingresos, la educación, la atención sanitaria, la vivienda, el cuidado de ancianos y de niños, y avanzando en conseguir una igualdad en la prestación de servicios públicos básicos entre las zonas urbanas y rurales. Este camino ha reducido las disparidades regionales y sociales, ha mejorado la sensación de satisfacción de la población en la vida económica, cultural y educativa, y ha mantenido la estabilidad social y la armonía a largo plazo mediante un diseño institucional justo, lo que ha fortalecido el impulso endógeno para el desarrollo nacional y la cohesión social. La modernización china está profundamente arraigada en la refinada cultura tradicional de la civilización china, lo cual le ha permitido trazar una ruta con características distintivas. A diferencia de algunos países que han abandonado sus tradiciones durante este proceso, la modernización china insiste en la innovación a través de la herencia y en la herencia a través de la innovación, integrando ideas como la benevolencia, el enfoque en las personas y la armonía en la gobernanza moderna, para forjar así un modelo distintivo de progreso coordinado en lo material y lo ético-cultural, describe el informe. Asimismo, indica que este camino basado en la cultura no solo ha fortalecido la confianza y la identidad nacionales, sino que también ha proporcionado un nuevo paradigma para la modernización del Sur Global. “Con sus diversas tradiciones culturales, los países del Sur Global pueden aprovechar y promover sus propias culturas refinadas, enriqueciendo la modernización con valores únicos, evitando la ruptura cultural y la pérdida de identidad, y manteniendo de este modo la vitalidad cultural y la subjetividad civilizacional durante sus procesos de modernización.” Fin

Por Vimag