WASHINGTON, 30 jul (Xinhua) — El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó hoy una proclamación para abordar los efectos de las importaciones de cobre e imponer a partir del 1 de agosto aranceles universales de 50 por ciento a las importaciones de productos de cobre semiacabados y de productos derivados intensivos en cobre. La proclamación ordena al secretario de Comercio de Estados Unidos establecer un proceso de “inclusión” de productos para añadir productos derivados del cobre a estos aranceles. El presidente también autoriza al secretario de Comercio tomar medidas conforme a la Ley de Producción para la Defensa para apoyar a la industria nacional del cobre, indicó la Casa Blanca en una hoja informativa. “Al realizar estas acciones, el presidente Trump está igualando las oportunidades para los negocios del cobre de Estados Unidos y así apoyar una industria nacional del cobre más fuerte”, añadió la Casa Blanca. El cobre es esencial para la base manufacturera de la que dependen la seguridad económica y nacional de Estados Unidos, y es un insumo necesario en una serie de sistemas de defensa, incluyendo aeronaves, vehículos terrestres, buques, submarinos, misiles y municiones, según la hoja informativa. Los futuros del cobre estadounidense en la bolsa mercantil de Chicago (Comex) se desplomaron 20 por ciento tras el anuncio, informó Bloomberg. Hasta esta tarde, el precio del cobre en Estados Unidos se cotizaba alrededor de 28 por ciento por encima de los futuros del cobre de referencia en la Bolsa de Metales de Londres, dado que los operadores anticipaban que el arancel sería aplicado a todas las importaciones de metal refinado. La decisión es la más reciente sorpresa de Trump que trastorna el mercado del cobre, indicó Bloomberg en su informe. Cuando el presidente planteó por primera vez la probabilidad de los aranceles a inicios de este año, causó un repunte en los precios del cobre en Estados Unidos, en comparación con el resto del mundo, y puso en marcha una carrera para trasladar cobre a Estados Unidos para eludir los aranceles, lo que generó beneficios significativos para algunos de los mayores operadores de metales del mundo. Fin