LA PAZ, 28 jul (Xinhua) — El Gobierno de Bolivia afirmó hoy lunes que emitir un voto nulo o en blanco en las elecciones nacionales es un derecho legítimo de la ciudadanía. Sin embargo, convocar a la destrucción de papeletas constituye un acto sancionable que “atenta contra el proceso electoral”. El pronunciamiento fue realizado por el ministro de Gobierno, Roberto Ríos, en respuesta a declaraciones del senador Leonardo Loza, del ala “evista” del Movimiento Al Socialismo (MAS), quien llamó a los electores a romper sus papeletas como forma de protesta durante los comicios generales del próximo 17 de agosto. “Respetamos la protesta pacífica y la libertad de expresión, pero llamar a romper papeletas ya es atentatorio contra el proceso electoral”, declaró Ríos en rueda de prensa en La Paz. El ministro exhortó a la población a no caer en provocaciones ni campañas que, según dijo, buscan convulsionar y desestabilizar el proceso democrático. Subrayó que manifestarse políticamente mediante el voto nulo o blanco es una forma válida de expresión, pero que la destrucción de material electoral puede constituir un delito electoral, con sanciones establecidas por la legislación vigente. El llamado al voto nulo ha sido impulsado por sectores cercanos al expresidente Evo Morales (2006-20019), que acusan al actual Gobierno de excluirlo del proceso electoral. “Bolivia garantiza la pluralidad de opciones y el derecho a la protesta, siempre que no derive en acciones que afecten la integridad del proceso electoral”, insistió Ríos. El Tribunal Supremo Electoral recordó la semana pasada que los votos nulos y blancos son registrados oficialmente en el escrutinio, pero no se suman a ninguna candidatura. Sin embargo, aclaró que la manipulación o destrucción del material electoral puede derivar en sanciones administrativas y penales. Fin