Por Carina López y Pool Contreras MÉXICO, 16 jul (Xinhua) — Por primera vez, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) reconoció como Patrimonio Mundial una ruta sagrada que representa no solo el legado histórico del pueblo wixárica de México, sino su cultura viva, que se practica en la actualidad y que ha perdurado por generaciones. Se trata de la “Ruta Wixárika por los Sitios Sagrados hasta Wiricuta (Tatehuarí Huajuyé)”, un corredor biocultural que abarca más de 500 kilómetros y cruza cinco estados mexicanos (Nayarit, Jalisco, Zacatecas, Durango y San Luis Potosí), donde se entrelazan peregrinaciones rituales, conocimientos ancestrales y una cosmovisión que ha resistido el paso del tiempo. El Gobierno de México celebró el sábado la inscripción oficial de la Ruta Wixárika en la Lista del Patrimonio Mundial de la Unesco, reconocimiento que marca un hito para las culturas originarias de América Latina y destaca la profunda interrelación entre tradiciones indígenas y preservación del entorno natural. Para el representante de la Unesco en México, Andrés Morales, esta declaración tiene una gran importancia para la humanidad, pues los sitios Patrimonio Mundial designan a lugares que tienen un valor universal excepcional, con el objetivo de ser protegidos para el conocimiento, aprecio y disfrute de las generaciones futuras. “Los sitios y bienes que se declaran Patrimonio Mundial tienen un valor universal que los hace excepcionales, únicos, irrepetibles. Son sitios naturales o culturales que tienen una importancia tal para las generaciones actuales y las futuras y, por ello, requieren una protección y una conservación particular”, dijo Morales durante una rueda de prensa que se realizó la víspera en la Ciudad de México. La designación, continuó el representante de la Unesco, la hace un Comité del organismo compuesto por 21 países, el cual se encarga de recibir las solicitudes, de analizarlas, de hacer comentarios. Es un proceso que lleva varios años. El Comité del Patrimonio Mundial incluyó a la Ruta Wixárika en la categoría de Paisaje Cultural Asociativo, siendo esta la primera vez que México se encuentra representado en dicha posición. Por su parte, el director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) de México, Diego Prieto, consideró que este reconocimiento permitirá conservar las condiciones territoriales, institucionales, sociales y políticas del país para que esta ruta tradicional se pueda mantener viva en el país latinoamericano. “Ellos, con esta Ruta, no solo se reproducen a sí mismos como pueblo, sino que también sirven a la humanidad para que esta no desaparezca”, declaró. Además, comentó que por medio de esta acción se ampara un conjunto de bienes, lugares y expresiones culturales y naturales que la humanidad deberá preservar para reconocer su sentido histórico y cultural, además de su valor para el pensamiento universal y lo que corresponde al medioambiente. En tanto, el representante de la comunidad wixárika, Totupica Candelario Robles, hizo un llamado a evitar aquellas actividades agroindustriales y mineras que puedan poner en peligro a sus territorios sagrados. “Estamos contentos, fue un trabajo difícil concretar esta inscripción. Que se siga manteniendo esta ruta sagrada que es importante para nosotros”, expresó Robles. En adición, uno de los integrantes de la comunidad wixárika, Diego de la Cruz, sostuvo que la declaración de la Unesco representa un avance para conservar las tradiciones y patrimonio de su pueblo. “Lo que siempre el pueblo wixárica ha manifestado es que se respeten las rutas de peregrinaciones y nuestra planta sagrada que es el peyote, el jícuri. Siempre que se nos respete esa parte y siempre los lugares y los sitios sagrados que se encuentran dentro de Wirikuta”, dijo De la Cruz a Xinhua. La cultura wixárika tiene raíces milenarias y está profundamente ligada a la naturaleza. Su visión del mundo considera que todo está interconectado: los seres humanos, los animales, las plantas, los elementos naturales y los dioses. Sus descendientes son reconocidos mundialmente por su arte lleno de simbolismo plasmado en bordados, estambres, chaquiras y pinturas que representan su mitología, animales sagrados y visiones rituales. México es el país del continente americano con el mayor número de bienes inscritos en la lista representativa del Patrimonio Mundial y el séptimo a nivel global. Fin

Por Vimag