LA PAZ, 8 jun (Xinhua) — El Gobierno de Bolivia inició este fin de semana un despliegue conjunto de fuerzas policiales y militares con el propósito de recuperar el control de las principales carreteras del país, tras una semana de bloqueos y manifestaciones opositoras, confirmaron las autoridades bolivianas. Los bloqueos carreteros están encabezados por sectores sociales afines al expresidente de Bolivia, Evo Morales (2006-2019), que buscan la habilitación del político como candidato y poder participar en las elecciones de agosto próximo para buscar un cuarto mandato presidencial, además de pedir la renuncia del presidente Luis Arce. Los operativos policiales y militares se desarrollan en puntos estratégicos de la red vial nacional y buscan restablecer el orden público, proteger a la población y garantizar el libre tránsito. Las acciones responden a los disturbios registrados en los últimos días en el departamento de Cochabamba (centro), donde se han reportado agresiones a policías, retención de ambulancias y ataques a personal médico. “Estas no son simples protestas, son actos organizados de violencia que amenazan la vida, la dignidad, los derechos fundamentales y el proceso electoral”, afirmó el ministro de Gobierno, Roberto Ríos. Uno de los focos más críticos es el municipio de Vinto, en Cochabamba, donde la noche del viernes manifestantes interceptaron una ambulancia y agredieron al personal de salud, así como a personas que recibían atención médica. El presidente Arce denunció el hecho como una “flagrante violación” del derecho internacional humanitario. “Agredir a personal médico en funciones está condenado incluso en escenarios de guerra”, escribió Arce en redes sociales. En tanto, el comandante departamental de la Policía de Cochabamba, Edson Claure, detalló este domingo ante periodistas que varias personas fueron aprehendidas por posesión de explosivos durante los operativos para retomar el control de la carretera de Cochabamba hacia el occidente boliviano. Otra treintena de personas fue arrestada en la carretera de Cochabamba y el occidente del país, entre ellas un dirigente político. Por su parte, la viceministra de Seguridad Ciudadana, Carola Arraya, refirió la existencia de indicios sobre el uso o posesión de armamento, lo que fue puesto a conocimiento del Ministerio Público para su investigación. Los bloqueos convocados por productores de coca (cocaleros) y organizaciones indígenas vinculadas a Morales exigen la inscripción del exmandatario como candidato presidencial, a pesar de la prohibición para la reelección del Tribunal Supremo Electoral de Bolivia. Los opositores al Gobierno exigen además la renuncia del presidente Arce, en un contexto de creciente tensión política e inconformidad social por el desabastecimiento de combustible y de alimentos en el país sudamericano. Fin