BUENOS AIRES, 5 mar (Xinhua) — Argentina se encuentra nuevamente bajo una ola de calor que afecta a 10 de los 24 distritos en que se divide el país, de acuerdo con datos del Servicio Meteorológico Nacional (SMN). En el caso de la ciudad de Buenos Aires, la capital de la nación sudamericana, el SMN emitió una alerta de color amarillo por las altas temperaturas, que, de acuerdo con el organismo dependiente del Ministerio de Defensa, “pueden ser peligrosas, sobre todo para los grupos de riesgo, como niños y niñas, personas mayores de 65 años, con enfermedades crónicas”. La sensación térmica por efecto de la humedad llegó a los 44,4 grados centígrados pasadas las 14:45 hora local (17:45 GMT). Ante las altas temperaturas, miles de personas en la capital se refugiaron en centros de compras con aires acondicionados, en plazas y en lugares de recreación abiertos para la temporada, como el Parque de los Niños, en la zona norte de la capital, y el Parque de la Ciudad, en la zona sur. En ese marco, en horas de la tarde se produjeron cortes en el suministro de energía en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), los que afectaban a más de 622.000 usuarios, el equivalente a unos 2 millones de personas, según estimaciones de la prensa local. Como consecuencia de la falta de suministro, lugares como la Casa de Gobierno y el Ministerio de Economía quedaron a oscuras, mientras que líneas de trenes de cercanías y de transporte subterráneo debieron suspender o reducir servicios. Barrios del centro y la zona sur de la capital, además de distritos de la periferia sur y oeste de la capital, se encontraban sin energía. El primer día hábil de la semana, luego de los feriados del lunes y martes por carnaval, mostró además inconvenientes en el tránsito en razón de semáforos apagados por la falta de energía. Según el SMN, nueve provincias y la ciudad capital se encuentran bajo alerta por las altas temperaturas. En las provincias de Corrientes, Formosa, Chaco, Misiones y Santiago del Estero, algunas de sus localidades se encontraban bajo alerta roja, donde las altas temperaturas pueden ser “muy peligrosas” y “afectar a todas las personas, incluso a las saludables”. Fin