RÍO DE JANEIRO, 29 oct (Xinhua) — Las acciones y prácticas que acercan las escuelas a las comunidades fueron el tema de la tercera y última reunión del Grupo de Trabajo sobre Educación, con representantes de los países del G20, que se celebró este martes en la ciudad brasileña de Fortaleza, con la participación de representantes de los países del Grupo de los Veinte (G20) y del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF). Según explicó ante la prensa el asesor especial para asuntos internacionales del Ministerio de Educación (MEC) de Brasil, Francisco Souza, quien coordinó la reunión, la intención era abordar cuestiones más cercanas a la realidad de las escuelas de los distintos países. “Creo que lo que le faltaba al grupo era poder dedicarse a cuestiones que estuvieran más sobre el terreno en las escuelas, que es precisamente lo que intentamos hacer en esta presidencia brasileña y, en particular, en esta cuestión del compromiso escuela-comunidad”, declaró a la prensa. Durante una reunión de los ministros de Educación de los países del G20 que se celebrará mañana miércoles, profesores y alumnos presentarán personalmente proyectos y acciones que han funcionado. Uno de ellos es Thando Ntintili, alumno de la Escuela Secundaria de Toli, situada en un pueblo rural de Sudáfrica. Forma parte de un innovador proyecto de compromiso comunitario que ayuda a mejorar la calidad del agua de un río local, contaminada por el uso humano y animal. La construcción de un filtro de agua devuelve la dignidad a la comunidad y permite que unas 500 personas tengan acceso a agua potable limpia. La escuela es reconocida como campeona nacional por esta iniciativa. “El compromiso escuela-comunidad es un concepto, un nombre difícil que utilizamos para referirnos a algo muy simple, el hecho de que la escuela no es una instalación pública aislada del barrio en el que se encuentra”, dijo Souza, añadiendo que “para la relación profesor-alumno, para el aprendizaje, es muy común que los propios profesores piensen en utilizar el espacio exterior, en el entorno”. “Hay un interés entre los jóvenes, los niños, por tener un aprendizaje que esté conectado con las transformaciones”, enfatizó el funcionario. Por su parte, la directora global de Educación y Desarrollo de los Adolescentes de UNICEF, Pia Rabello Britto, dijo que “el mundo se enfrenta a una crisis de aprendizaje. Siete de cada diez niños de 10 años de todo el mundo no pueden leer una frase básica. ¡Siete de cada diez! Esto significa que la comunidad mundial está fallando a nuestros niños. Necesitamos una acción urgente”. Britto hizo hincapié en que las pruebas demuestran la importancia de la proximidad de la escuela a la comunidad. “Cuando existe un entorno vecinal más seguro en el que vive un niño, es más probable que aprenda, especialmente las niñas. Cuando están en un entorno más seguro, tienen menos probabilidades de abandonar la escuela, que es un problema importante en el mundo: 270 millones de niños abandonan la escuela. No podemos permitirnos perder más niños”, declaró, y subrayó la importancia de que el tema se debata en el marco del G20. “Para cambiar los resultados de la educación, uno de los principales factores determinantes es el compromiso político”, dijo. “Una plataforma como el G20 es muy importante porque reúne a los países más poderosos del mundo, además de la Unión Europea y la Unión Africana, que arrojan luz sobre lo que hay que avanzar. Por lo tanto, el G20 tiene un papel muy importante que desempeñar en la concienciación sobre el tema, en la creación de un compromiso político en algunos de los países más poderosos del mundo para poder avanzar en la agenda para el aprendizaje y para los niños”, explicó. Fin