QUITO, 9 sep (Xinhua) — Un Tribunal de Ecuador negó hoy lunes un recurso de apelación dentro de un “habeas corpus” correctivo presentado por la defensa del exvicepresidente del país, Jorge Glas, preso desde el pasado 5 de abril en una cárcel de máxima seguridad acusado de corrupción. La decisión fue adoptada por el Tribunal de la Sala de Apelación de la Sala Especializada de lo Laboral de la Corte de la provincia de Guayas (suroeste), por lo que Glas permanecerá recluido en la cárcel “La Roca”, de la ciudad de Guayaquil, en Guayas. En principio, los abogados de Glas solicitaron el cambio de la prisión por arresto domiciliario, pero luego desistieron y pidieron que su cliente sea llevado a la cárcel 4, en el norte de Quito, la misma que acoge a políticos y expolicías. “Este petitorio resulta inoficioso, ya que (…) el traslado a la cárcel 4 de Quito no ha sido solicitado en la demanda y mucho menos ha sido una pretensión”, señala el fallo del Tribunal difundido por la prensa local. Este fallo es un nuevo revés para el exvicepresidente Glas, quien ha interpuesto al menos dos recursos de “habeas corpus” para salir de la cárcel “La Roca”. Glas, quien fue vicepresidente de Ecuador de 2013 a 2018, fue detenido durante la incursión de policías ecuatorianos en la Embajada de México en Quito, después de que el Gobierno mexicano le otorgara asilo político, decisión que fue rechazada por el Gobierno de Ecuador. El exvicepresidente, sentenciado a seis y ocho años de prisión en dos casos por corrupción, estaba refugiado desde diciembre pasado en la Embajada México en calidad de huésped. La defensa de Glas ha alegado que dentro de la prisión no ha recibido atención médica adecuada para sus dolencias físicas y psicológicas, aunque el Ministerio de Salud ha documentado 79 atenciones médicas en el penal, entre el 6 de abril y 2 de julio de este año. El pasado 3 de septiembre, un comité internacional que aboga por la libertad de Glas, alertó sobre el deterioro de la salud del exvicepresidente y pidió a organismos internacionales, como la Cruz Roja, conformar una misión que visite la cárcel para constatar la situación. Según la defensa de Glas, el exfuncionario toma más de 40 medicamentos diarios debido a que tiene múltiples cuadros clínicos y su condición de salud mental. El pasado 5 de agosto, el Gobierno de México pidió formalmente a Ecuador un salvoconducto para que Glas pueda ser enviado a un tercer país debido a que se encuentra en “crítico estado de salud”, según la cancillería mexicana. Un día después, Ecuador ratificó que “no es lícita” la concesión del asilo a Glas y que no entregará un salvoconducto para que pueda salir del país. Fin