BRASILIA, 1 ago (Xinhua) — El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, sancionó hoy jueves la ley que establece una reforma a la educación secundaria, la cual comenzará a implementarse en 2025 para los nuevos estudiantes, mientras que para aquellos que ya estén cursando este nivel educativo tendrán un período de transición. La reforma, aprobada por el Congreso tras nueve meses de tramitación, tiene como objetivo ampliar los contenidos de la formación básica curricular, incluyendo asignaturas tradicionales como lengua portuguesa, matemáticas, física, química, inglés, historia y geografía, según lo establecido por la Base Nacional Común Curricular. La carga horaria de la formación general básica en los tres años de educación secundaria será de 2.400 horas. Se deberán completar 600 horas adicionales con asignaturas de los itinerarios formativos, que incluyen materias opcionales a elección del estudiante. De esta manera, la carga total será de 3.000 horas, divididas en 200 días lectivos de cinco horas cada uno. La nueva ley responde a la demanda de la comunidad escolar y de entidades educativas, que se movilizaron y presionaron por el cambio debido al descontento con el modelo de educación secundaria que entró en vigor en 2022, el cual redujo la formación general a 1.800 horas. La reforma también incrementó la formación general básica en la educación técnica a 2.100 horas, con 900 horas adicionales dedicadas a la formación profesional, totalizando 3.000 horas de carga total. Para profesiones que requieran más tiempo de estudio, 300 horas de la formación general podrán usarse para profundizar en asignaturas relacionadas con el curso técnico, como más horas de física para estudiantes de electrotecnia. El texto sancionado establece el inglés como única lengua extranjera obligatoria. Los parlamentarios rechazaron la inclusión del español en la formación general básica, aunque podrá ser ofrecido según la disponibilidad de los sistemas educativos. En las comunidades indígenas, la educación secundaria podrá impartirse en las lenguas maternas de cada pueblo. Cada municipio brasileño deberá mantener al menos una escuela con oferta de educación secundaria regular nocturna, siempre que haya una demanda manifiesta y comprobada por ese turno en las inscripciones realizadas ante las secretarías de educación. Con la nueva ley, los itinerarios formativos deberán seguir directrices nacionales, que serán elaboradas por el Consejo Nacional de Educación (CNE), un órgano colegiado formado por representantes de la sociedad civil designados por el Ministerio de Educación. Las asignaturas optativas en la educación secundaria deberán estar relacionadas con uno de los siguientes cuatro itinerarios formativos: lenguajes y sus tecnologías, matemáticas y sus tecnologías, ciencias de la naturaleza y sus tecnologías o ciencias humanas y sociales aplicadas. Los defensores de la restricción señalaron la experiencia fallida en varios estados donde la falta de estandarización llevó a una ampliación de desigualdades. Fin
