QUITO, 8 jul (Xinhua) — El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, afirmó hoy lunes que en los primeros seis meses de su Gobierno tomó decisiones duras porque el país “colapsaba” y que lo asumió “prácticamente quebrado” con 4.600 millones de dólares de pagos pendientes. Noboa sostuvo en entrevista con la radio local Sucre que recibió un país “despedazado”, pero que en estos meses de gestión “ha hecho cosas buenas”. Dijo que ha tenido que buscar financiamiento para reactivar la economía y dar seguridad a la población, en el contexto de la ola de violencia que azota a la nación. “Y creo que lo más duro ya lo pasamos”, aseguró el mandatario, quien en abril pasado incrementó del 12 al 15 por ciento el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y el 28 de junio pasado elevó el precio de las gasolinas de mayor consumo tras eliminar el subsidio estatal. “Aún así con todas las medidas duras que hemos tomado, tenemos números relativamente positivos (…) estamos teniendo mejores números que en 2023”, comentó el mandatario, un joven empresario y político de 36 años. Noboa detalló que en el primer trimestre de 2024, el Producto Interno Bruto (PIB) de Ecuador creció 1,2 por ciento respecto al mismo periodo de 2023, cuando la proyección era de 0,5 por ciento, además de que la deuda pública bajó de 50,7 a 49 por ciento del PIB. “La recaudación tributaria subió 500 millones (de dólares), crecimiento en ventas locales 2.000 millones de dólares, inflación controlada”, complementó el presidente. Añadió que si no hubiese tomado medidas en los primeros meses de Gobierno, “no tendríamos en esta segunda mitad inversión pública que se transforma en empleo, ni dinero para seguir peleando una guerra (contra el crimen organizado) y pagar atrasos” heredados del Gobierno anterior. Noboa apuntó que el Gobierno tiene más liquidez gracias a la asistencia de organismos multilaterales, por lo que destinará recursos a inversión en infraestructura. Destacó, asimismo, la lucha que emprendió su Gobierno contra bandas del crimen organizado ligadas al narcotráfico, lo que le llevó a declarar en enero pasado un “conflicto armado interno”. Indicó que la “guerra contra los narcos” ha permitido reducir los homicidios en cerca del 20 por ciento, así como las “vacunas” (cobros de extorsión). Dijo que bajo este escenario cuenta con una aprobación a su gestión de entre el 55 y el 57 por ciento, según encuestadoras privadas, de cara las elecciones presidenciales de 2025, respecto a las que ha expresado su intención de buscar la reelección. “Hay pocas opciones y la gente lo ve (…) hicimos lo que nadie se atrevió hacer antes y hoy en día cinco encuestadoras (…) nos ponen como el candidato a batir. Estamos arriba del 33 por ciento de intención de voto”, subrayó. Fin