ASTANÁ, 4 jul (Xinhua) — El presidente chino, Xi Jinping, pidió hoy jueves, en Astaná, a los miembros de la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS) que garanticen la seguridad de cara a la verdadera amenaza derivada de la mentalidad de la Guerra Fría. Al dirigirse a la 24ª Reunión del Consejo de Jefes de Estado de la OCS, celebrada en la capital kazaja, Xi también instó a los países miembros a adherirse a la visión de una seguridad común, integral, cooperativa y sostenible, a abordar los desafíos complejos y entrelazados en materia de seguridad a través del diálogo y la coordinación, y a responder al panorama internacional lleno de cambios profundos con un enfoque de ganancias compartidas, a fin de construir un mundo de paz duradera y seguridad universal. Mientras el mundo se enfrenta a cambios acelerados no vistos en un siglo, la sociedad humana se encuentra de nuevo en una encrucijada de la historia, resaltó Xi. Tras señalar que la organización ha contado con su décimo Estado miembro desde su creación hace 23 años, el presidente chino dijo que la base para la cooperación de la OCS se ha hecho más sólida a medida que la “gran familia” de la OCS tiene una membresía cada vez mayor, cubriendo tres continentes en todo el mundo. Xi añadió que la OCS está en el lado correcto de la historia, la equidad y la justicia, y es de gran importancia para el mundo. El mandatario también pidió a los miembros de la OCS que salvaguarden el derecho al desarrollo ante los riesgos reales de “patio pequeño con vallas altas”. Los miembros de la organización, según el presidente Xi, deben adherirse a los beneficios mutuos y la inclusividad, unirse para impulsar la innovación científica y tecnológica, mantener estables y fluidas las cadenas industriales y de suministro, estimular el impulso interno de las economías regionales, y trabajar hacia objetivos comunes de desarrollo. Además, Xi enfatizó que los miembros de la OCS deben consolidar la unidad y oponerse conjuntamente a interferencias externas, ante los verdaderos retos de injerencia y división. “Los miembros de la OCS han de apoyarse contundentemente unos a otros, adaptarse a las preocupaciones de los demás, gestionar las diferencias internas con un espíritu de armonía, resolver las dificultades de cooperación a través de buscar un terreno en común dejando de lado las diferencias, y tomar en nuestras propias manos, con firmeza, el destino de nuestros países, así como la paz y el desarrollo de la región”, agregó el presidente chino. Fin