BRASILIA, 1 jul (Xinhua) — El Centro de Gestión y Operaciones del Sistema de Protección de la Amazonia (Censipam), un órgano público brasileño responsable de la preservación de la región, alertó hoy lunes sobre una sequía severa este año en la Amazonia, por lo que llamó a las autoridades a tomar las medidas preventivas y de asistencia necesarias para ayudar a las poblaciones afectadas. Las precipitaciones por debajo de la media en gran parte de la región, junto a las previsiones de temperaturas por encima de lo normal, son motivo de preocupación para las autoridades. En declaraciones a la estatal Agencia Brasil, el analista del Censipam, Flavio Altieri, dijo que los estudios apuntan a una sequía muy similar a la del año pasado en la región. “Tenemos los efectos del fenómeno de El Niño que aún interfieren en la región y mantienen el calentamiento del (océano) Atlántico Norte y Sur, lo que también interfiere con poca lluvia en la Amazonia”, señaló Altieri. En los 12 meses transcurridos hasta abril de este año, el Monitor de Sequía de la Agencia Nacional de Aguas y Saneamiento registró un déficit de un 27 por ciento en el volumen de precipitaciones. Según el superintendente de Operaciones de Eventos Críticos, Alan Vaz Lopes, los niveles de agua y el caudal de los ríos de la Amazonia, aunque tengan grandes volúmenes, son muy sensibles a la falta de lluvias. “Un pequeño déficit de precipitaciones en un momento determinado provoca una gran reducción de los niveles de agua y del caudal de los ríos”, dijo. Para los expertos, los efectos más inmediatos de la grave sequía podrían afectar gravemente a la navegabilidad de los ríos. “Las poblaciones más aisladas se ven afectadas especialmente porque, al tener ríos no navegables, tienen dificultades para desplazarse y adquirir productos de consumo”, explicó Altieri. Sólo en los ríos Solimões, Amazonas, Madeira y Tapajós hay 4.695 kilómetros de vías navegables, a través de las cuales se transportaron 78,2 millones de toneladas de mercancías el año pasado, lo que supone el 55 por ciento de lo que se movió dentro del país por esta vía. El suministro energético de Brasil es otro sector sensible, ya que la región alberga 17 centrales hidroeléctricas responsables del 23,6 por ciento del consumo del Sistema Interconectado Nacional. La estacionalidad de la sequía en la Amazonia ocurre en etapas desiguales en toda la región, por lo tanto, las indicaciones varían según el período de sequía, que suele alcanzar su punto álgido en septiembre y noviembre. Según Altieri, durante estos meses se redobla la atención, pero actualmente no hay indicios de grandes preocupaciones en cuanto al suministro de energía. Fin
